Cuando una familia da la bienvenida a un nuevo bebé, los papás a menudo se sienten emocionados, alegres, y en algunos casos, un poco inútiles. Esto sucede sobre todo cuando se trata de la lactancia materna. Pero la verdad es que hay muchas cosas que el padre puede hacer cuando es la hora de comer del bebé. Participar en la lactancia es útil en una época en la que los matrimonios y las parejas están bajo mucho estrés. Además, entrar en el ritmo de la lactancia puede ser un desafío para la madre y el bebé, por lo que el apoyo del padre es muy importante.
Cómo involucrarse en la lactancia materna
Por encima de todo, la positividad y el apoyo son la clave. Más allá de eso, aquí hay algunas recomendaciones específicas de los médicos y especialistas en lactancia para los padres que quieren estar más involucrados en el proceso.
Aprender sobre lactancia materna
Para ser sinceros, puede ser difícil ser positivo y apoyar el proceso de lactancia si no conoces los detalles de este (es más complicado de lo que crees). Puedes leer sobre ello, asistir a clases de lactancia con tu pareja o hablar con el médico sobre lo que necesitas saber. Esto puede ayudarla a sentirse más segura de sí misma cuando amamante. Tener una sólida base de conocimientos sobre los términos de la lactancia, los posibles desafíos y el proceso en sí, es un paso importante.
Entender los obstáculos comunes de la lactancia materna
Comprender las dificultades comunes de la lactancia también puede ayudar a tu pareja a sentirse más preparada. Por ejemplo, puede desarrollar dolor o el bebé puede tener problemas para sujetarse. Cualquiera que sea el desafío, es útil que el padre sea consciente de ello y sepa cómo ofrecer apoyo.
Ayudar con la posición del bebé
La posición es un factor importante cuando se trata de la lactancia. Los papás pueden proporcionar almohadas y ajustar el soporte de la espalda cuando sea necesario. Además, la mamá puede no ser capaz de ver lo que está pasando desde su punto de vista. El padre puede ser el par de ojos adicionales que ella necesita para asegurarse que el bebé esté bien acomodado para alimentarse. Recuerda que, aunque la posición del bebé es importante; ¡la mamá también necesita estar cómoda!
Ofrecer ayuda
Como probablemente te imaginas, una vez el proceso de amamantar ha comenzado con éxito, no es un buen momento para que mamá se levante y tome un vaso de agua, una almohada extra o un reposapiés. El hecho de que estés cerca para conseguir lo que ella necesita puede ser increíblemente útil. Por ejemplo, una vez que la leche fluya, la mamá inevitablemente tendrá mucha sed, lo cual es muy común. Asegúrate de que tenga un gran vaso de agua cerca y cualquier otra cosa que pueda necesitar.
Prepararse para las tareas del pañal
Tu bebé necesita hacer espacio en su pequeño estómago para la comida entrante, lo que significa que hará popó y mucho. Este es un gran momento para que los padres intervengan y ayuden. Si te preguntas o te preocupa lo que ves en el pañal, aquí tienes todo lo que necesitas saber sobre el popó del bebé.
Mantener un buen estado de ánimo
Por último, no olvides que la lactancia del bebé puede ser bastante agotadora para el cuerpo. Aunque la lactancia es un proceso hermoso, también puede ser estresante, incómodo y a veces doloroso. Ayuda a tu pareja a adaptarse a cada toma creando el ambiente adecuado. Asegúrate que esté cómoda con la temperatura de la habitación. Arregla la iluminación. Pon música. Ofrece palabras positivas y alentadoras. Haz todo lo que puedas para crear un ambiente pacífico y agradable.
Un sistema de apoyo fuerte y capaz es la clave para una lactancia exitosa. ¡Sólo porque los padres no estén equipados con las herramientas adecuadas para la lactancia, no significa que no puedan participar en el proceso!